Escapa, siempre escapa, a la luz, a los vientos,
A las dolorosas picaduras de la noche,
Tiene el talento de morder imágenes que se internan en los espejos,
Puede ser el aire que resbala delante de cada gota de lluvia,
Ríe cuando sopla hormigas hasta el océano,
Solo necesita dos pantalones y tres medias,
La única camisa cambia de tono en tono, de sombra en sombra,
No mira a los armiños ni a las nubes demasiado blancas,
Es demasiado rápido, jugoso, ondulante, pegajoso a veces,
No es un duende, ríe cuando piensan eso de él,
Les tira barro a las clasificaciones y sigue riendo,
Sus piernas confunden, las rodillas a veces siguen a los tobillos,
Y los muslos caen hasta los dedos de los pies,
Si le preguntas si ama o amó, mejor bajes la vista,
Cuando se va, te das cuenta de que sigues escribiendo y él no está
No hay comentarios.:
Publicar un comentario